Corría el mes de diciembre en curso, había nevado y la casualidad hizo que pasara por donde se debía encontrar la ermita del Santo Cristo y la sorpresa fué ¿ qué ha pasado? No está.
Pero la noticia corrió y hasta la Plataforma para la Defensa del Gistredo ha tomado cartas en el asunto, a cuya defensa me sumo.
Pretendemos conservar vivas nuestras costumbres, vocablos,reliquias culturales, molinos, lagares,potros,fraguas,castros, corones, ermitas, etc. pues son parte de nuestro Patrimonio cultural y etnográfico.
Cuatro ermitas tenía Noceda, las cuatro damas de honor para la Iglesia parroquial de San Pedro Advíncula, cuales eran la de San Bartolo, San Antonio, Las Chanas y la del Santo Cristo.
Todas ellas merecieron ser restauradas, menos la del Santo Cristo, a la que borraron del mapa de Noceda de un plumazo de grua sin expediente ni juicio.
¿Es que no merecía ser restaurada como las otras? ¿Corría prisa desaparecerla?
Ahora que la Junta de C y L está dotando de subvenciones para restaurar iglesias y edificios religiosos¿ no se podía esperar y completar las restauraciones?
Su estructura era fuerte, de paredes de piedra, anchas y su antiguedad histórica.
Era un trozo de nuestra memoria desde la niñez, pues era lugar de referencia para citas y despedidas de amigos o familiares que vivíamos en distinto barrio, por estar ubicada en La Peralona y marcar el lugar de encuentro entre los barrios de San Pedro y Vega.
No es por devoción ni por religiosidad, no; es que han cercenado un trozo de nuestro Patrimonio y de nuestro espacio vital.
¿A quién molestaba ? o ¿ a quién beneficia?.
No se hace camino borrando el pasado, o ¿ tal vez sí ?
¿Se informó al pueblo de tal decisión? O más bien se actuó con premeditación haciendo tábula rasa sobre la opinión que ello merecía?
¿Qué fue de las imágenes? Qué alegó la autoridad religiosa?
En su día ya se expolió parte de las imágenes y artesonado de la Iglesia Parroquial, que al parecer, fué a parar al Museo de Astorga, por eso no es extraño que la Autoridad Eclesiástica no haya vetado su derribo.
¿Acaso actuó por libre la Alcaldía? Es de suponer que no haya sido así, pues de lo contrario habría sido un insulto a la Memoria del pueblo.
Claro, ¿ a quién le importaba su existencia?
Pues, cristianos o ateos, era parte de nuestra herencia ancestral. era nuestra ermita, la ERMITA DEL SANTO CRISTO.
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